Poco tiempo atrás se acercó una persona pidiendo un consejo. La semana anterior se encontraba en un carro con un matrimonio amigo. El marido de ese matrimonio era el que estaba conduciendo el carro.
En la conversación derivada de varios temas, porque eran amigos, conversaron acerca de su situación económica lo cual no les era tan favorable debido a que ellos pagaban un alquiler de casa incluyendo los gastos de mantener el carro y la subsistencia de un niño de 5 años.
En ese momento conversaron de decisiones económicas que ellos debían resolver.
Ella comenzó a sentir mucha rabia y odio hacia ellos, que precisamente no eran ellos el problema siendo que esas emociones bajas las venía experimentando desde hacía tiempo.
Con tanta rabia por dentro, imaginó mentalmente que el matrimonio tenía un accidente de tránsito, por la única razón en que ella se quería justificar de que ellos querían ejercer control económico de la paciente, a través de solicitudes de préstamos personales.
Estaba realmente muy rabiosa al punto del descontrol emocional deseándoles el mal. En su relato ella creía que tenían que pagar por algún daño y que ellos no merecían la prosperidad.
Su emoción era negativa y pesimista, en el cual ella les echó una maldición para que ellos tuvieran un accidente de tránsito. Su situación era inestable y con vulnerabilidad y sus conjeturas eran erráticas.
Esa paciente emocionalmente perjudicada sufría de delirios y fantasias creyendo y armando y desarmando su mundo fuera de la realidad. No le gustaba mirarse al espejo porque no aceptaba ser la persona en que se había convertido, cuando de joven tenía un buen pasar de vida y ahora se sentía sola y abandonada.
Ella que se mostraba ser casi perfecta con un alto coeficiente intelectual proclamaba que las demás personas tenían que ser como ella, porque así creía y no se daba cuenta que todas las personas son diferentes y no existen dos iguales.
Dicho así, a la semana siguiente el matrimonio tuvo un accidente de tránsito sin seguro y con solo un mes para terminar de pagarlo para que se convirtieran en dueños.
Por ende, esta paciente psiquiátrica no entendía como se había materializado su ferviente envidioso pensamiento.
Hemos llegado a la siguiente conclusión: con toda su rabia y la envidia de que ellos habían concretado ser una familia, lo cual ella tiene esa carencia porque su infancia estuvo presagiada por sufrir maltrato infantil junto con unos traumas no resueltos que se habían proyectado en el futuro, era víctima de fantasias mentales que llegó a proyectarlo con un fuerte deseo de maldad haciendo que ese pensamiento surtiera efectos, convirtiéndola en realidad.
La mente tiene poder, las palabras tienen poder y juntando deseos de envidia y rabia mal canalizada se convirtió en ese punto de partida proyectándolo hacia la realidad en el futuro.
Esta mujer sola, sin familia y sin amigos con tanta fuerza de odio hizo realidad el pensamiento que les echó. No es para menos que ella sigue en tratamiento psiquiátrico con períodos de inestabilidad emocional y realizando gestiones de control emocional, lo cual sería muy conveniente realizar para equilibrar las emociones y evitar situaciones de desgracia resultantes de factores emocionales mal dirigidos.
De momento, estable y aguardando el famoso lema, todo vuelve.
Conclusiones
- Tener mucho cuidado con los deseos derivados de la rabia u otras bajas emociones porque tienen una connotación de hacerse realidad y de materializarse.
- En el caso del odio o de la envidia siguiendo una escala creciente es aun peor porque son sentimientos que se proyectan formando la realidad con mas fuerza.
- Las ideas, pensamientos y emociones son parte de nuestro Universo y por ende tener mucho cuidado qué nos permitimos pensar, para evitar hacer daño, lo cual es nuestra responsabilidad por entero.
- Nunca olvidar que nosotros somos los arquitectos de nuestro destino, que es un brainstorm (lluvia de pensamientos) de la realidad que nosotros mismos creamos.
Autora: Carla Ximena Fernández Grasso es Coach en gestión de emociones. Email: [email protected]. Título completo del artículo: Aprende a cuidar tus pensamientos e intenciones al sentir emociones fuertes.
Datos para citar ese artículo:
Fernández Grasso, Carla Ximena. (2020). Cuida tus pensamientos al sentir emociones fuertes. Irradia Terapia México. https://psicologos.mx/cuida-tus-pensamientos-al-sentir-emociones-fuertes/ [Consultado el ].
Susan dice
Me encanta leer todo sobre crecimiento personal me da más madurez emocional.